En los últimos años, ha aumentado considerablemente la deficiencia de vitamina D en la población. Factores como un estilo de vida mayormente en interiores, el uso constante de bloqueador solar y la escasa exposición al sol han limitado su síntesis natural. Aunque tradicionalmente se ha asociado con la salud ósea, hoy sabemos que la vitamina D también cumple un rol fundamental en la piel: ayuda a modular la respuesta inmunológica, favorece la regeneración celular y actúa como un antiinflamatorio natural.
Una deficiencia de esta vitamina puede reflejarse en la piel con signos de sequedad, envejecimiento prematuro, alteraciones en la función de barrera y una mayor predisposición a afecciones dermatológicas como acné, dermatitis atópica o psoriasis.
Frente a esta problemática, surge un nuevo enfoque: la suplementación dérmica. Este concepto permite ofrecer los beneficios de la vitamina D directamente sobre la piel, sin necesidad de exponerse a los riesgos de la radiación solar. En este contexto, la línea Full Spectrum de Arkana representa un hito innovador.
Gracias al activo biomimético Vitamin D3-like, estimula los receptores cutáneos de la vitamina D de forma tópica, replicando sus beneficios de manera segura y eficaz. Pero su acción no se limita solo a este aspecto: también protege frente a los múltiples agresores urbanos que afectan la piel a diario.
Su fórmula incluye IBR-SolAge y CityStem, ingredientes conocidos por su capacidad para:
- Reparar el ADN celular
- Prevenir el fotoenvejecimiento
- Proteger frente a la radiación UV, luz azul (HEV), polución y estrés oxidativo
- Contrarrestar los efectos de la glicación
En conjunto, la línea Full Spectrum no solo cubre las necesidades de una piel expuesta al entorno moderno, sino que ofrece un enfoque integral para devolverle equilibrio, protección y salud desde un nuevo paradigma dermocosmético.